miércoles, 27 de febrero de 2013

Algunos de la tribu humana

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Jonás no era religioso, más bien disfrutaba poniendo en apuros teológicos a aquellos que confiaban tanto en lo santo, que hubieran criado un hijo, si la iglesia les hubiera dicho que el embarazo había tenido lugar gracias al espíritu santo. Formaban parte de la "tribu" una serie de personas "frikis" todos ellos, por unas u otras razones.


Jonás era un experto jodiendo la marrana, en todas sus aserciones, lo mismo le daba molestar por la mañana que por la noche, se había labrado una reputación exquisita, a la hora de contar con alguien que llegara hasta el final, a la hora de joder pero bien a alguien que considerara (esto era muy importante para él) una basura pre o post humana.

Lo suyo más bien era lograr perdidas y destrozos, retrasos, molestias, hostigamiento,  e incluso atacar de cualquier modo y manera o forma lo que sustentaba aquello que perjudicaba sin duda a la humanidad, o eso decía, era mejor no discutir con él.

Llegó como siempre, de entre las sombras y como si fuera un gato, de repente  comenzó a hablar.
Vengo del cuartel general, estaba ardiendo, parecía que el incendio había sido provocado por una explosión, el coche de Roberto estaba en medio de la calle, como si fuera una pelota, quemado, con Roberto dentro al parecer, mucho más quemado.

Así lo soltó, Ana quedó pálida, empezó a respirar hiper ventilando, lo cual hizo que se desmayara a los pocos segundos, llevaba con Roberto cuatro años y se acababa de enterar que había quedado carbonizado en su coche en medio de la calle.

Elisa abanicaba a Ana mientras le gritaba a Jonás que era estúpido "idiota!!!, que parece que no tienes sentimientos ni te afecta nada joder!!!" el "pelotas" un experto en sistemas decía que había recibido un mensaje de Roberto citándonos en  el cuartel general esta mañana, pero no habían ido porque se había encontrado con Ana y Elisa, que le habían dicho que Roberto quería quedar en el club, no en el cuartel.

Todos estaban extrañados y contrariados al pensar el por qué Roberto les había citado en dos sitios diferentes, cuando todos habían recibido el mismos mensaje de quedar en el cuartel, todos menos Ana y Elisa, que habían hablado con Roberto justo antes de recibir el mensaje.

Ana se recuperó, entre sollozos explicó cómo le había contado Roberto que tenía algo muy importante que decir, que pensaban irse lejos de allí ese mismo día, cuando regresara de dar un disco a Antonio.

Joder, Antonio, ¿qué había sido de él?

Jonás, ven conmigo, tenemos que conseguir información, vamos a ver a la policía.
Mientras nos íbamos Ana recordó que le había dado un disco Roberto, quedamos en que lo vieran mientras averiguábamos algo, que en un par de horas o tres estábamos en el club. Ninguno de los dos sabíamos que una de aquellas tres personas que dejábamos allí, no la volveríamos a ver.

Manuel, dile a Arco que Roberto le dejó un disco escondido en donde él sabe, ¿donde él sabe?, le pregunté, sí, eso es lo que me dijo Roberto que le dijera a Arco, sollozó Ana mientras nos marchábamos.

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